Caracas, 9 de mayo de 2007 .- Carlos Ocariz, Secretario General de Primero Justicia, y Julio Borges, Coordinador Nacional, junto a los dirigentes, militantes y simpatizantes expresaron su apoyo al alcalde de Baruta, Henrique Capriles Radonski, quien ayer, y de manera arbitraria la sala de apelaciones reabrió su caso. “ayer de nuevo se demostró lo elástica y podrida que esta la justicia en Venezuela, una justicia que es usada como instrumento de persecución de la dirigencia política, una justicia tarifada, una justicia podrida. Ayer, también se ratificó la necesidad de la existencia de un partido que se llama Primero Justicia, un partido político como el nuestro, que busca la justicia para la gente”, destacó Ocariz.
Recordó que casi toda la dirigencia, diputados regionales, concejales, alcaldes y dirigentes políticos del partido, hoy se encuentran bajo la lupa de esta justicia complaciente con juicios, juicios de juicios y contra juicios. “el procedimiento realizado contra el alcalde Capriles tiene 33 jueces, más de 90 horas de juicio durante todos estos años que se le ha infringido esta tortura judicial a nuestro alcalde y a su familia. Ojala se hubiera usado todo ese tiempo para resolver 33 asesinatos, para disminuir la impunidad de los atracos, las violaciones y otros cientos de delitos que se producen a diario. Pero no. Prefieren invertir ese dinero para perseguir a la disidencia política”.
Ante estas vicisitudes, Ocariz reafirmó el compromiso del partido en seguir en la lucha, para seguir sembrando la esperanza y el optimismo en Venezuela. “ayer nos tumbaron y nos paramos, como esta aquí hoy primero justicia de pie frente a las adversidades. De pie para decirle a Henrique Capriles que lo acompañamos en su lucha, para decirle a Henrique Capriles que vamos a estar con el luchando por la justicia en Venezuela. Pero no solo con Capriles, vamos a estar con esos cientos de miles de personas que están siendo víctimas de una justicia tendenciosa, podrida, y tarifada.”
Dijo que Venezuela no se merece una justicia de quinta como la tenemos hoy “y es por eso, que pese a lo que paso ayer, un hecho que evidencia que la justicia esta podrida hasta los tuétanos, también nos ratifica la necesidad de seguir luchando por una Venezuela de la justicia, y que no existe zancadilla que tumbe la esperanza de un Futuro con Justicia. Un día en Venezuela habrá justicia. Más temprano que tarde. Nos pueden amarrar y encarcelar, pero nuestro corazón no dejará de palpitar, y por esos seguimos apoyando a Capriles, a los presos y perseguidos políticos, a los venezolanos que no tienen justicia en nuestro país.”.