Caracas, 30 de diciembre de 2007.- Primero Justicia mostró los resultados de la agenda política del 2007 del mandatario nacional. Para el máximo representante de Primero Justicia, Julio Borges, la mediación de la paz en Colombia, es una iniciativa muy plausible, sin embargo, la otra cara de la moneda es que mientras se lucha por la paz en Colombia, “en Venezuela nos matamos en la guerra de la impunidad, el hampa y las drogas. Luz en la calle y oscuridad en la casa. Además, alguien se pregunta ¿Por qué las FARC le hacen a Chávez el regalo o el intento de mediar la entrega de los secuestrados?".
Para el 2008 Borges expresó que se debe partir de una reflexión de cada uno de los venezolanos. "Presidente basta ya de protagonizar novelas internacionales, no sea pantallero y dedíquese a trabajar para los familiares de casi 50 muertos diarios que claman por un plan nacional contra la inseguridad… Si algún mensaje está claro luego del 2 de diciembre, es que el pueblo venezolano quiere paz y reconciliación".
Recalcó que la ruptura política entre pueblo y PSUV fue increíble. "La creación del partido único, el PSUV fue un fracaso. Trajo la división del movimiento político del gobierno al irse Podemos, quedarse paralizado el PPT y enconchado el Partido Comunista. Un partido con supuestamente 7 millones de militantes, que en su elección más importante mueve a poco más de la mitad de sus supuestos militantes".
De igual forma, el líder de Primero Justicia sostuvo que el cierre de RCTV fue un desgaste que no nos llevó a ningún sitio. "Perdimos un gran canal de Televisión con más de cinco décadas de historia, para crear otro canal que no ha cuajado en el gusto de los venezolanos. La estatización de CANTV y ELECAR fue totalmente innecesaria”.
Respecto al proyecto de reforma constitucional que planteo el presidente Hugo Chávez, Borges dijo que "hay que ver todo el derroche de energía, tiempo, dinero, oportunidades, foco, que se perdió discutiendo una reforma que está totalmente divorciada de lo sueños de los Venezolanos. Aquí es donde debe haber la reflexión más profunda, todos los venezolanos queremos un país con los valores contrarios a los que estaban en el proyecto, es decir, una Venezuela de propietarios, descentralizada, de gobierno civil, de más respeto a los derechos humanos, sociales y económicos, una economía moderna, de sector privado diversificado, abierto y creador de empleo, de alternabilidad en el poder…".